sábado, 21 de abril de 2012

El largo camino a un mundo mejor (I): echando la vista atrás

La culpa es de la Historia (casi siempre)

 
Ahora que en casi toda Europa reina una especie de seudodemocracia, es fácil olvidar cómo funcionaba el sistema político en la Edad Media en buena parte del continente. Por aquel entonces, el sistema gobernante funcionaba en una especie de organización de "vasallaje". Distintos nobles juraban fidelidad y apoyo a otros nobles para parapetarse tras su poder. Es menos conocida su relación con los habitantes (por entonces rara vez ciudadanos) de a pie. En realidad tal relación variaba bastante en función de la época concreta y del lugar geográfico exacto. Sin embargo, podemos establecer varios puntos de partida:

  1. Los campesinos constituían la parte más baja de la pirámide social, debiendo de pagar diezmos e impuestos (en ocasiones a varios nobles). El noble o la iglesia de turno se comprometían a alimentarlo en caso de hambruna, lo cual dejaba bastante margen en caso de simple escasez.
  2. Los artesanos y comerciantes formaban su propia casta, con sus propios niveles. Podemos hacernos una idea de las implicaciones echando un ojo a esas entidades religiosas tan particulares que aun tenemos en España: las Cofradías. Algunos sectores productivos eran capaces de imponer bastantes condiciones particulares. También los Colegios Profesionales son vestigio de esto.
  3. La clase financiera (casi exclusivamente, judíos, ya que era la única religión que podía prestar con intereses a quienes no fueran judíos). Tras el odio a los judíos subyace principalmente las enormes deudas con ellos contraídas, un tanto de disonancia cognitiva al pedir prestado dinero a sabiendas de que ese trato era pecaminoso.
En España debemos considerar el sistema de extensión geográfica propio de la Reconquista: la justificación para reclamar un territorio debía de incluir el tener habitantes en tal territorio, así que después de liberarlo del dominio musulmán lo inmediato era poblarlo, para lo que no se dudaba en conceder distintos beneficios a tales nuevos moradores.

Siempre me llamó la atención la relativamente poca capacidad militar de cada noble en tal época. Su sistema de vasallaje permitía organizar entidades pequeñas en torno a entidades pequeñas, en lugar de por ejemplo el sistema romano, que creaba una entidad muy grande que abarcaba todo. ¿Cómo podía funcionar eso? ¿Cómo podían obligar a sus vasallos a darles casi todo lo que tenían?

Es común suponer que ahora somos muy listos y antes debían de ser tontos de alguna forma. Y es cierto que las enfermedades que los azotaban constantemente, la poca o nula educación y las supersticiones que entonces eran moneda corriente, parecen ayudar en esa dirección; mas sólo cuando aprendes lo lejos que estamos de ser listos y entiendes que somos el resultado de millones de años de evolución, tal idea se vuelve estúpida. Así que ¿por qué lo harían?

En general, campesinos y artesanos aceptaban su situación a cambio de seguridad: yo trabajo, y no paso hambre; tú me proporcionas caminos por los que transitar y en los que comerciar; tú te encargas de que no me asalten en tales caminos o en mi casa. Un campesino aceptaba ser campesino para otro porque era lo que había hecho toda su vida.

¿Era fácil cambiar? Aun hoy, la verdadera flexibilidad laboral, es decir, la capacidad de cambiar de profesión si la que uno tiene no es la más adecuada a sus circunstancias, es muy baja. ¿Hay algún motivo para suponer que entonces no era igual, o peor? Al fin y al cabo, el campesinado es una profesión a tiempo completo. Hay meses en los que no tienes nada que hacer (invierno), pero el resto del año trabajas de sol a sol. Y, si esto es así, ¿qué podrían haber hecho para mejorar? muy poco.

Echemos más la vista atrás y tomemos perspectiva: la (breve) Historia de la Humanidad se compone de periodos muy largos que a su vez contienen otros periodos muy largos. De todas formas, podemos ver como el tiempo se va comprimiendo a medida que nos acercamos a nuestra época (aunque eso también es porque nos conocemos más). Aun así, cuando hablamos del Antiguo Egipto estamos considerando un sistema geopolítico que duró 5000 años; Roma duró más de 1000, y la actual nobleza ha ido cediendo el poder durante otros 1000 años, hasta que el comercio y la ciencia trajeron la globalización, que es el sistema que pretende sustituir al viejo orden (y no sólo en Europa).

Inciso: una cosa que me resultó bastante sorprendente y que nunca había tenido en cuenta es que la actual monarquía española está supuestamente emparentada (la garantía de paternidad 100% no existe) con un tronco familiar que lleva ¡10 siglos! gobernando buena parte de Europa. Parece que fue capaz de adaptarse a sistemas tan dispares como el viejo feudalismo, la monarquía absolutista y los sistemas parlamentarios que predominan ahora.

Cuestión de tiempo libre

Una característica importante para que los miembros de una sociedad puedan efectuar cambios de calado es la oportunidad para hacerlo. Y uno de los requisitos de dicha capacidad, es el tener tiempo...

  • Tiempo para aprender. Los miembros de una sociedad tienen que conocer su situación y poder fijarse unos límites. Como es difícil inventar algo que no existe, es importante el tener algún referente, algo que envidiar en otros lugares, para pretender imitarlos en la medida de lo posible. En otras palabras, tener una meta.
  • Tiempo para crear. Una vez que una sociedad sabe a dónde quiere ir, tiene que tener ocasión de ponerse en marcha. Esto habitualmente pasa por la participación política, pero también por el trabajo comunitario, que permite influir y ser influidos por la gente del entorno.
Uno de los logros de la política moderna se resume en la cita política "los ciudadanos quieren [aquí el asunto de turno]". Así transmiten la idea de que la sociedad delega en ellos las dos tareas antes enunciadas (aprender y crear), ya que bastante tienen con ocuparse de sus vidas. El paralelismo con el sistema feudal es, en mi opinión, inevitable.

Otro de los elementos políticos utilizados para someter a la sociedad es, de nuevo de forma paralela al feudalismo, la seguridad, en todas sus vertientes.

Comencemos por la ahora llamada seguridad ciudadana. Uno podría pensar que en un estado donde los ciudadanos eligen las cámarasa que votan las leyes, que pueden ser juristas, abogados, jueces o fiscales estudiando una carrera que se imparte en universidades públicas, la necesidad de "participar activamente" en la "impartición de justicia" es un poco absurda. Es decir, después de que cualquier ciudadano pueda prepararse para una tarea en sí misma compleja dedicándole varios años, pretenden convencernos de que es inteligente que las sanciones finales las decida gente que no ha querido prepararse. Además, con esto lo que hacen es reservarse más aun el papel de redactores de leyes: las leyes que nos gobiernan, al parecer, sí que no son asunto nuestro.

Por otra parte, y como es lógico, la sociedad estará dispuesta a intercambiar más a cambio de seguridad, a medida que perciba que esta es menor. Un beneficio adicional para la clase dirigente es que entre la sociedad se extiende un sentido de culpa: ¡qué sería de nosotros sin ellos para que nos protegiésemos y defendiésemos de nosotros mismos!

Y para esto, se aprovechan de que la sociedad apenas tiene tiempo para conocerse a sí misma. Inmersos en aprender a competir con nosotros mismos por las migajas que a veces caen de Su mesa, no es posible dedicar tiempo a aprender todo lo que necesitamos saber para conocernos y cambiarnos. Basta seguir unos cuantos programas de Redes (de Punset) para observar lo disparatadamente lejos que está el conocimiento humano sobre sí mismo del que tiene la propia sociedad de tal conocimiento.

En mi opinión, los mayores cambios de los últimos milenios han venido de la mano de la ciencia, del conocimiento. Vivimos mejor porque sabemos más medicinas, porque producimos más y mejores alimentos, y somos más humanos porque nos comunicamos cada vez más unos con otros: como si así nos contagiásemos nuestra humanidad. Sin embargo, apenas hemos podido cambiar nuestro sistema socioeconómico, y las discusiones intelectuales al respecto se reducen a las creencias de unos señores muertos hace más de un siglo que intercambiaban pareceres respecto a las fábricas que conocían, aislados del mundo exterior.

4 comentarios:

  1. Creo que eres demasiado optimista... XD

    Todos nuestros conocimientos los han mercadeado, así la medicina no busca que estemos sanos, eso no es negocio! las farmacueticas comercian con la vida y la muerte para engordar sus propios dividendos.

    El negocio es depender de sus productos y sus patentes. La comida no es cada vez más sana, grandes empresas terroristas rncubiertas crean patentes de semillas (¿?) sien éstas las únicas que se pueden sembrar y así controlan la producción y precios. Envenenamos el aire necesario para respirar, extinguimos animales y fauna, y contaminamos el agua, vital para nosotros.

    Deberíamos aprender, pero hemos desvirtuado demasiadas cosas... hemos prostituido demasiados valores...
    seré demasiado pesimista?

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  2. El objetivo del artículo sólo es desprestigiar un poco la idea del cambio político de los últimos años, afirmando que el mayor cambio viene de la ciencia: vivimos más y mejor porque tenemos más recursos gracias a ella, no porque ahora el reparto sea espectacularmente mejor. De hecho, es una primera entrada porque la idea es que haya más, y sobre patentes y negocios se ha hablado en otras entradas ;)

    Puntualizar que no es cierto que "la comida no es cada vez más sana". Nunca antes hubo tanta seguridad alimentaria... mejor dicho, la seguridad alimentaria es una prioridad por primera vez en la historia. Antes simplemente no era relevante qué se comía y en qué estado estaba. Por mucho fraude que haya, imáginate las que podían liar antes que no había vigilancia alguna.

    También es cierto que hay mucho interés en desprestigiar los avances tecnológicos... adivina por quien, fundamentalmente. Para muchos, es mejor comer comida "natural" al estilo del medievo y enfermar y morir como entonces que la evidente mejoría de la salud de la población general. Es decir, no te fijes en lo que _dicen_ que comemos: fíjate en la salud general de la población ;)

    Por supuesto, la revolución industrial trajo consigo los problemas de contaminación aludidos y graves; pero el avance en el conocimiento también trae consigo la preocupación por estas causas y posibles soluciones. El ser humano _pre-revolución industrial también contaminaba, también desertificaba, también extinguía especies enteras de animales y plantas (y como mucho las consecuencias las adjudicaba a un castigo divino por vestir de uno u otro color xd). Si bien es cierto que la diferencia de escala es muy importante, se puede afirmar que en realidad esos valores también son modernos. ¿crees que a los habitantes de Oceanía les preocupaba la suerte de las especies animales que allí había hace milenios?

    De valores y de educación tengo prevista que sea la próxima entrada sobre este tema.

    Salud, y gracias por los comentarios ;)

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    1. Estaré pendiente de las próximas entradas!

      Salud y gracias por las respuestas ;) XD

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  3. Tanto la Educación como el Dinero.... aportan seguridad al ciudadano. Con lo cual, bien podría decirse que ambos forman parte de un único sistema de control, o alternativamente que son un control a mayores de la llamada "seguridad ciudadana" que protege, especialmente, la propiedad privada, incluso por encima de las vidas humanas.

    Mientras no se cambien también el modelo educativo, basado en llenar a los alumnos de conocimientos pre-diseñados, y un sistema económico basado en atribuir un valor monetario a todo, va a ser difícil cambiar las cosas!

    Un Saludo!
    Un saludo!

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